"La Capilla Sixtina es uno de los lugares más significativos del mundo cristiano. En efecto, es a la vez la Capilla papal y la sede del cónclave (la asamblea de cardenales que elige al pontífice). Su fama se debe también a que en su seno se conservan algunas obras que son las más altas expresiones artísticas de la civilización occidental. En la decoración de la capilla han trabajado los mejores pintores italianos de finales del siglo XV. Aquí Miguel Ángel ha realizado dos obras maestras en frescos: la Bóveda, con la historia del Génesis (1508-1512) y la pared de fondo, con el Juicio Final (1536-1541). La capilla debe su nombre al Papa Sixto IV della Rovere (1471-1484), que quiso reestructurar la antigua Capilla Palatina, mencionada en los documentos como “Capilla Magna”. La realización de esta grandiosa obra empezó en 1477 y terminó el 15 de agosto de 1483, fecha en que el Papa inauguró con gran solemnidad la capilla dedicada a la Asunción. Según Vasari, el proyecto que preveía la utilización de las obras de fábrica medievales hasta un tercio de su altura, fue del arquitecto Baccio Pontelli, aunque en los documentos se cita el nombre de Giovannino de’ Dolci. Algunos estudiosos indican que las medidas del aula (40,93 metros de largo, 13,40 de ancho y 20,70 de altura), corresponden a las del templo de Salomón en Jerusalén, destruido por los romanos en el año 70 d.C.."

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